En Chile La Ley de divorcio se aprobó desde el 7 de Julio de mil novecientos ochenta y uno (1981) desde entonces, generalmente se atribuye la custodia de los hijos a uno de los progenitores, correspondiendo al otro un cronograma de visitas y régimen de estancia.
La custodia también denominada en ocasiones tenencia, en términos generales es la responsabilidad que tienen los padres en la educación, educación , alimentación y bienestar de los hijos.
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Acuerdo profesional de custodia compartida
Una de las medidas que hay que acordar en caso de separación o divorcio en caso de existir hijos menores de edad es la custodia.
Esta medida podrá ser de mutuo acuerdo por ambos progenitores regulando según convenio , a falta de acuerdo, será establecida por un juez mediante sentencia.
Existen dos tipos de custodia actualmente en Chile te la mostraremos a continuación:
- La primera, denominada custodia en exclusiva es aquella en la que un progenitor cumple con un régimen de alimentación y visitas mientras que el otro progenitor convive con los menores.
- Por otra parte tenemos la custodia compartida en la que ambos progenitores son los encargados del cuidado cotidiano de sus hijos.
Sea cual sea el tipo de custodia para tu caso te aconsejamos:
Redacta un acuerdo que describa compartida las responsabilidades de cada progenitor
Actualmente el cuidado personal compartido de un menor de edad se puede definir como “un régimen de vida que procura estimular la corresponsabilidad de ambos padres que viven separados, en la crianza y educación de los hijos comunes, mediante un sistema de residencia que asegure su adecuada estabilidad” (art. 225, inciso 2 Código Civil o CC chileno 1).
Para garantizar dicha estabilidad es necesario redactar un acuerdo de tenencia compartida donde especifique las responsabilidades de cada progenitor en temas de estudio, alimentación, higiene, tiempo de esparcimiento, lugar de domicilio entre otros.
Asegúrate de que ambos padres son capaces de comunicarse eficazmente y de cooperar entre sí.
La comunicación con el personal de la guardería o del colegio y con el niño y entre sí, ayuda a toda la familia a adaptarse a la situación. Así como a reducir los conflictos entre miembros del núcleo familiar.
A lo largo del tiempo los estudios han demostrado que no es la separación lo que más influye en las dificultades de adaptación de los niños, en cambio el conflicto y la falta de cooperación entre los padres es lo que influye en su mayor porcentaje en la adaptación de nuestros pupilos cuando existe custodia compartida.
Por lo tanto, es importante que encuentren formas de superar la tristeza, ira y frustración para desarrollar una relación enfocada en el bienestar del niño.
Luego de la separación, hay que tomar decisiones que prioricen las necesidades y la vida del niño, que deben tratarse cuando existe una custodia compartida, es por esto que los padres divorciados también deben asegurarse de hablar entre ellos con fluidez.
Establece normas y límites que cada progenitor deba cumplir
Comúnmente en el estilo de crianza autoritario, los progenitores adoptan un rol de control excesivo sobre sus hijos/as, pidiéndoles poca autonomía de esta manera tienden a imponer las normas de manera inflexible y unidireccional, sin detenerse en las necesidades específicas de los menores. frecuentemente recurren al castigo en caso de incumplimiento por parte de el menor (s).
Por otro lado, es común ver padres no establecen ningún tipo de límites, situación que la mayoría de las veces termina en problemas de variedad de índole.
Si deseamos tener un buen desarrollo parental, sin importar si la custodia es total o si es una custodia compartida es de suma importancia establecer normas y límites
Programar revisiones periódicas con un terapeuta o un mediador
Luego de que se produce una ruptura de la convivencia es común que existan algunos sentimientos que impidan el buen funcionamiento familiar y por ende el desarrollo de una tenencia compartida se recomienda La terapia familiar que puede ser útil en cualquier contexto familiar que produzca estrés,conflicto, dolor, ira.
Es por esto la importancia de poder coincidir en un espacio con las condiciones óptimas para el desarrollo de la terapia, junto con el acompañamiento de un profesional, puede apoyarte a ti y a los miembros que integran tu grupo familiar a tener una mejor comprensión así como a aprender a enfrentar desafíos o situaciones para lograr acercarse unos a otros.
